En este paseo en particular buscábamos salir de la rutina diaria y salir de la ciudad, nunca es mala idea ir a Antigua, esta antigua ciudad te brinda un respiro diferente y siempre regresamos frescos.
Queríamos comer un postrecito por la tarde acompañado de un buen café o chocolate caliente. Mi esposo se decidió por llevarnos a "La Posada de Don Rodrigo", y tuvimos la oportunidad de estar en la terraza desfrutando de la hermosa vista y de un no tan despejado volcán pero aun así maravilloso. Aunque déjenme decirles que no solo la terraza es bella sino desde la entrada a todo las distracciones que encontramos adentro.
Caminar por las calles de Antigua, es mágico, es transportarnos a una era colonial tan hermosa, ya les he contado que de novios íbamos mucho mucho y no queremos perder esa costumbre ahora de casados acompañados por supuesto de nuestra pequeñita.
Flan de la casa, tiene higo y camote...
Chocolatito caliente...
Espero no se queden con las ganas de visitar este magnifico lugar...
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